El Congreso de la República tiene, desde el jueves de esta semana, la responsabilidad de sacar adelante la reforma laboral diseñada por el gobierno del presidente Gustavo Petro. Y no serán pocas las presiones que tendrán los legisladores, sobre todo en medio de un ambiente electoral para elegir alcaldes y gobernadores.
Esta es una de las grandes preocupaciones de la patronal, principalmente de los comerciantes, lo que hace que las bancadas del Congreso terminen definiendo una reforma más por intereses particulares que por aspectos económicos, técnicos y sociales.
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, en entrevista con EL TIEMPO, reflexiona sobre este y otros aspectos de la iniciativa, que de aprobarse tal y como está, podría generar un efecto contrario al objetivo que persigue para mejorar las condiciones laborales de millones de colombianos, según dijo.
¿Les gustó el proyecto que llevó al Congreso?
Debo decir, primero, que los comerciantes participamos en unas mesas técnicas, pero no hubo una concertación real del proyecto y En ese sentido anunciamos que esa iniciativa no va en el sentido de solucionar el problema de los más de 15,9 millones de desempleados e informales en Colombia. Está direccionado a brindar mejores condiciones para esa minoría de colombianos que hoy gozan de estar dentro de la fuerza laboral del país y especialmente de aquellos que están sindicalizados, pero no resuelve los problemas estructurales del mercado laboral colombiano. De lo contrario, dificultará el acceso de esta población al mercado laboral formal del país.
¿Qué los hace pensar qu’eso será así?
Porque el corazón del proyecto de reforma apunta a incrementar de manera sustancial los costos laborales y de manera particular para el comercio, que hoy por hoy es el mayor generador de empleo en el país, pues uno de cada cuatro colombianos (25.6 por ciento) trabaja en cualquiera de las actividades de este sector.
¿De qué magnitud sería ese impacto de aprobarse el proyecto como está?
Con los ajustes de la jornada laboral, el incremento en la remuneración de los dominicales y festivos, entre otros, estamos hablando de unos extracostos de entre 14 y 20 por ciento adicional, según cálculos de Fedesarrollo, pero si eso se le suma el 16 por ciento del incremento del salario mínimo este año, tenemos costos entre 30 y 35 por ciento. Ahora, nuestros cálculos apuntan a un mediano plazo, si la reforma se implementa como este proyecto, podríamos pasar de 3,4 millones de empleados a un nivel cercano a los 4,5 o 5 millones.
¿Siente que no fueron escuchados por el Gobierno en las reuniones previas?
Is that no fue a reunion of concertación sino a reunion tripartita entre sindicatos, Gobierno y gremios that duró tres horas, en la que el articulado y nuestro papel fue más bien de sensibilizar al Gobierno ya las obreras sobre las implicaciones de lo que podria haber salido mucho peor Lo que hicimos fue tratar de atajar una serie de artículos que podrían tener grandes implicaciones. Por ejemplo, el que se refiere al incremento obligatorio del CIB a todo salario sin importar su monto al comienzo de cada año. Logramos que eso se aplicara solo hasta dos salarios mínimos, porque muchas empresas no habrían podido absorber ese impacto en sus costos. También se mejorará el artículo qu’habilitaba el derecho a la huelga por motivos políticos, económicos, ambientales o solidarios.
¿Qué destaca del proyecto como se presentó?
El tema de la estabilidad laboral reforzada, en la medida que tiene una proteccion importante en los trabajadores, hay algunos artículos que no compartimos de ese capítulo donde se le dio, por ejemplo, posibilidades de que cualquier trabajador por motivos familiares pudiera estar amparado en esa estabilidad laboralpero desde el punto laboral de las mujeres en embarazo, de la protección de trabajadores que se vayan a pensionar pronto nos porque puede que tenga un adelanto importante.
¿En qué cree que falla esta iniciativa?
En el enfoque integral. El régimen laboral y el Código Sustantivo del Trabajo son muy antiguos y rígidos y no dan cabida ni oportunidad, por ejemplo a las nuevas modalidades de negocios ya los emprendedores del país. Antes que buscar mayores rigideces en la contratación, lo que se debería plantar es una flexibilidad para contratarpor ejemplo, por horas con el reconocimiento de todas las servicios sociales de forma proporcional, pero ahora, por el contrario, en el capítulo de contratación de esta reforma se vulve mucho más difícil hacer contratos a término definido y parcial, se vulve mucho más difícil prescindir de empleados por justa causa porque se incrementan los costos.
¿Qué le piden al Congreso frente al proyecto?
Que exista una discusión objetiva y responsabilidad de los congresistas de escuchar a los gremios, la academia, los trabajadores y el país en general en las audiencias públicas. Nuestra preocupación un poco que por motivos políticos las bancadas del Congreso acaba definiendo una reforma laboral mucho más por un interés particular, en un contexto electoral como el actual, que teniendo en cuenta los argumentos económicos, técnicos y sociales que hemos plantado.
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